Perfil del Internista
El internista es un médico especialista en la atención integral de pacientes adultos con enfermedades de alta prevalencia, con preparación formal para realizar acciones de prevención, diagnóstico y tratamiento médico, con el apoyo de los recursos tecnológicos disponibles y con fundamento en el conocimiento que tiene de la historia natural y de la fisiopatología de las enfermedades, independientemente de la localización del padecimiento en los distintos órganos, aparatos o sistemas, con dominio de las interrelaciones entre distintas enfermedades, de las interacciones de diferentes tratamientos y con criterio para solicitar la participación de otros especialistas, cuando el caso lo requiera.
CONOCIMIENTOS
- De la epidemiología, historia natural, fisiopatología, métodos para la prevención primaria y secundaria de las enfermedades prevalentes en su ámbito de trabajo, así como de las interrelaciones de distintas enfermedades e interacciones de diversos tratamientos.
- De la indicación, utilidad, riesgos y complicaciones de los procedimientos diagnósticos y terapeúticos a su disposición.
- Del método científico y de la docencia.
- Del método estadístico aplicable a la investigación clínica y epidemiológica.
HABILIDADES
- Para establecer una relación médico-paciente y médico-familia de confianza mutua.
- Para llevar a cabo un interrogatorio ordenado, concreto, completo y congruente con el padecimiento, realizar una exploración física completa, métódica, precisa y congruente con los problemas del paciente.
- Para integrar en forma oportuna y jerárquicamente ordenada, los diferentes problemas médicos existentes en un paciente y planear correctamente un programa de estudio y tratamiento, inclusive en caos de urgencia.
- Para realizar diagnóstico diferencial por el método de selección lógica de hipótesis alternativas.
- Para la interpretación de los diferentes estudios de laboratorio y gabinete, accesibles y necesarios para atender pacientes con enfermedades de alta prevalencia.
- Para realizar procedimientos diagnósticos y terapéuticos necesarios para la atención de enfermedades de alta prevalencia, incluyendo los que se requieren en casos de urgencia, siempre y cuando no requiera anestesia general, empleo del quirófano o equipo de tecnología compleja.
ACTITUDES
- Espíritu humanista y de servicio.
- Especial disposición para el enfoque integral del paciente incluyendo aspectos biológicos, psicológicos y sociales.
- Apertura para las necesidades de comunicación con pacientes y familiares.
- Autocrítica que Ie permita conocer sus limitaciones, solicitar apoyo cuando sea necesario y derivar al paciente cuando proceda.
- Disposición para trabajar en equipo, como apoyo para otros especialistas, o como coordinador de un equipo de salud.
- Disposición de superación y actualización permanentes, de trasmitir sus conocimientos y experiencias a pacientes, familiares, alumnos y compañeros.
- Criterio para la selección de estudios diagnósticos y procedimientos terapéuticos que brinden mejores opciones en términos de salud, con menos molestias y menor costo social y económico para el paciente.
- Sensibilidad para tener en cuenta las implicaciones personales, familiares y sociales de la atención de paciente, para poderle brindar una mejor orientación y apoyo.
- Aceptación de la responsabilidad del cuidado y atención de sus pacientes.
- Conciencia de su responsabilidad social y de su importancia dentro del sistema de salud.
- Actuar conforme a la ética médica.